Por: Alejandra Castañeda, estudiante de mercadeo y publicidad, creative intern de Connect your Brand
La humanidad vuelve a tomar conciencia de su fragilidad, vivimos tiempos disruptivos donde todas las predicciones que hicimos para el año cambiaron de un momento a otro. No estaba en los presupuestos de nadie una pandemia que volcaría el sistema sanitario y económico del mundo.
¿Estábamos listos para un cambio así? La respuesta es no. Fuimos testigos de la incertidumbre y el pánico de la sociedad porque no estábamos preparados ni física ni económicamente. Vimos un gran número de iniciativas de empresas grandes, medianas y pequeñas que ofrecieron su apoyo ante la alarmante situación, con el objetivo de ayudar y de tomar acciones que reflejaran su compromiso con la responsabilidad social. La reinvención y ola de solidaridad de estas empresas evidencia un plan estratégico a largo plazo, puesto que el impacto social que produjeron con sus acciones puede ser importante para generar mayor posicionamiento frente a los consumidores.
Desde millonarias donaciones para la adquisición de equipos de salud y mercados, hasta detener sus producciones para fabricar productos esenciales que asistieran a las personas en la pandemia, como el sector textil dedicado a fabricar batas quirúrgicas o el sistema de transporte ofreciendo un servicio gratuito para el personal médico. Todos aportaron su granito de arena para hacer la vida de las personas más llevadera y demostrar el lado más humano del entorno corporativo.
Las empresas se reinventaron para ayudar, cambiaron su producto estrella por productos que beneficiarán al sector salud. El crecimiento económico pasó a un segundo plano cuando la vida de todos está de por medio; las marcas comprobaron la veracidad de su propósito, se humanizaron, se conectaron con el consumidor, recuperaron la confianza y lograron comprender a los usuarios en este tiempo de necesidad, pero ahora empieza lo más importante de esta coyuntura: Mantener el lazo de confianza ganado con el consumidor sin dejar de lado la solidaridad y demostrando que como empresas hacemos parte del cambio y podemos generar la empatía que el mundo necesita.
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